El uso del Internet continúa revolucionando la comunicación humana e influyendo en un sin número de nuestras actividades cotidianas.   El número de personas que lo utilizan, es cada vez mayor.
El INEGI (Instituto Nacional de Estadística y Geografía), en colaboración con la Secretaria de Comunicaciones y Transporte, publicaron en los resultados de  la encuesta a nivel nacional acerca de la Disponibilidad y Uso de Tecnologías de Informacion en los hogares (ENDUTIH), que en el año 2014, el 44.4% de la población de México estaba utilizando internet, y en 2019 el 70% se declaró usuaria de Internet.

Aparentemente la Terapia en Línea tuvo sus primeros brotes en 1990.    Hoy en día, hay cada vez mas sitios en Internet ofreciendo estos servicios, y se han suscitado debates acerca de su efectividad, así como también se han originado preocupaciones de carácter ético, tales como el hecho de que en muchas de las ocasiones, los Clientes no tienen manera de saber con quien están consultando, y desconocen cuales son los valores, las practicas, el nivel de competencia y el profesionalismo del Terapeuta.   Esta modalidad terapéutica además lleva consigo cierto riesgo de vulnerabilidad de la privacidad. 

Hay Organizaciones en Estados Unidos que han publicado estudios acerca de la efectividad de la Terapia en Línea vs la Terapia Presencial llevada a cabo por personal calificado y en determinados contextos, así como acerca de las precauciones a considerar por parte del usuario que decida emplear esta modalidad terapéutica.    Leer mas acerca de esto.

En lo personal, considero que la Terapia Presencial tiene ventajas muy importantes sobre la Terapia en Línea por el hecho de que la comunicación entre Cliente(s) y Terapeuta es más completa.  En aquellos casos en los que es necesario que varios miembros de la familia acudan a las sesiones terapéuticas, considero que definitivamente la Terapia Presencial funcionaría mejor que la Terapia en Línea.  Sin embargo hay algunos casos en los cuales la Terapia en Línea puede ser recomendable:

• En aquellos casos de personas que padecen de una enfermedad o problema que las incapacita para salir de su casa.
• En aquellos casos de personas que por sus propias razones no les agrada la idea de asistir a un consultorio terapéutico, o pudieran sentirse mas confortables participando en el proceso de consultoría si este fuera en su propia casa u oficina y en un ambiente con el cual están más familiarizadas, como lo es el caso del uso del Internet.
• También pudiera ser recomendable en casos de familias o parejas que por razones geográficas no pueden asistir a terapia de otra manera.
• En la actualidad (Marzo 2020), dada la contingencia por el Covid-19, pudiera ser recomendable para evitar salir de casa y exponerse al contagio. 

Dentro de mi experiencia, he recurrido al uso de la Terapia en Linea en varios casos de personas que por razones geográficas era lo mas recomendable, y la taza de éxito ha sido similar a la obtenida en la Terapia Presencial.

Si consideras que en tu caso funcionaría mejor la Terapia en Línea, o tienes alguna duda, por favor envíame información pertinente utilizando el formato de la Página Contacto para hacer una evaluación y definir en conjunto contigo cual es la opción de comunicación mas adecuada.  Por favor incluye tu dirección de correo o número telefónico, en caso de que necesite contactarte para tener mayor información.    O también puedes llamarme utilizando los números telefónicos documentados en el pie de esta página.